jueves, 7 de octubre de 2021

El fracaso escolar en relación a la nueva ley de educación

 Este nuevo post viene a relacionar el art. 91.1 b) de la nueva ley de educación con el contenido del documental "Un pulso al fracaso". Desde el enunciado del artículo de la ley que me corresponde, el que cual enuncia enuncia "La evaluación del proceso de aprendizaje del alumnado, así como la evaluación de los procesos de enseñanza" como una de las propuestas a incorporar en el sistema educativo.

El documental trata la historia de una serie de adolescentes que por una razones u otras han terminado encadenando expulsiones de centros educativos y conductas negativas relacionados con el estudio y la educación, como la acumulación de suspensos, malas conductas o absentismo. Estos adolescentes se encuentran en el centro "El Tomillo", pensado este, para reflotar a aquellos adolescentes que arrastran un fracaso escolar de razones históricas. Los alumnos partícipes en el documental expresan sus opiniones sobre ellos mismos, las razones que creen que les ha llevado a su condición y sus esperanzas y deseos de futuro. 

Los alumnos suelen achacar que la escuela es un lugar aburrido y poco motivante, aunque observan como con según que profesores logran una mayor atención. Los profesores son conscientes de todo lo que sus alumnos sienten en las aulas, por lo que realizan especial hincapié en la actitud de cada uno, buscando enfatizar la posibilidad de que re-motivar a los alumnos es posible. Achacan la baja motivación de estos a su largo historial de fracaso, haciendo que vean el sistema educativo en el que han vivido, como ajeno a su ser. Por esta razón, para reflotar la motivación de los chavales, buscan actividades que les hagan sentirse útiles y exitosos. Todo ello, como los mismos profesores reconocen, supone alejarse de los objetivos estrictamente curriculares y centrarse en aquellos de tinte más personal. Esto puede significar, en base a lo que el artículo dice, la adaptación de los procesos de aprendizaje, puesto que se entiende el aprendizaje más allá de los objetivos curriculares, llegando a valores morales, de comportamiento, de trabajo y de desarrollo personal. 

Para rematar este proceso, los profesores de "El Tomillo", nos vuelven a remarcar la trascendencia de que estos alumnos se sientan útiles para si, y con la sociedad. Uno de los grandes refugios de los alumnos es el mercado laboral, en el que depositan la esperanza de la independencia y la autorrealización.  Por ello, el profesorado además de prestar atención a su "reinserción" académica, no deben de perder de vista las metas del alumnado. Para ello les dan a atender la importancia del estudio en la consecución de un trabajo, que les aporte aquello que desean. El profesorado de esta forma, recalca la necesidad continua, de adaptarse a las exigencias de tan complejo alumnado. Logran esto gracias a una comunicación fluida entre todos los componentes del centro y a una flexibilidad de sus procesos de enseñanza y evaluación. Esto nos lleva directamente a la segunda parte del artículo con el que partíamos este post. 

Gracias al conocimiento que los profesores tienen de los alumnos, y a la aplicación de métodos flexibles, consiguen de alguna forma, borrar la traumática experiencia que para los alumnos ha supuesto su carrera académica. Logran por tanto, que los alumnos se sientan productivos, motivados y confiados para desarrollar aquellos proyectos que deseen, reestableciendo la confianza en sí mismos, dándoles una segunda oportunidad. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Uvas con queso saben a verso

Como colofón a este maravilloso blog, voy a tratar un tema delicado. ¿Cuál será mi aportación educativa?, ¿En qué podrá ayudar y enriquecer ...